Existen muchísimas fuentes gratuitas de las más diversas familias tipográficas que puedes usar en tus libros.
Pero no solo en tus libros sino también en tu página web, en tu blog y en los materiales que creas para promocionar tus creaciones.
Si bien existen una multitud de bitácoras de descarga, pero no todas son necesariamente transparentes. Por eso, a continuación, te presentamos tres páginas web donde los datos de las fuentes son claros.
Así, podrás conocer la licencia que tiene cada fuente y qué uso permite con el fin de evitar cualquier inconveniente.
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Google Font
Es una de las páginas más famosas para descargar tipografías, ya que es uno de los productos de la empresa Google. Esta web aloja fuentes para páginas web, pero muchas de ellas pueden usarse sin inconvenientes para materiales impresos.
Fiel a todos los productos y servicios de Google, la página tiene una estética minimalista. Esto es algo que se agradece cuando se buscan fuentes gratuitas porque de este modo nuestra vista tiene más despejado el contexto para encontrar la tipografía adecuada.
Las diferentes opciones de búsqueda que están en la columna derecha facilitan la encontrabilidad de las fuentes. Cinco categorías clasifican a grandes rasgos las más de 800 tipografías que hay en Google Fonts a mediados de abril de 2018.
Podemos empezar a buscar por serif, sans serif, display, handwriting y monospace. Luego, se puede afinar la búsqueda por la cantidad de estilos que tiene la fuente o cuán gruesa o delgada es.
Si quieres cambiar alguna fuente de las plantillas de Maqueta tu libro recuerda que para textos largos siempre es mejor elegir una serif. Para textos más cortos las sans serif se leen sin problemas.
Cuidado con las otras tres categorías porque son tipografías ornamentales y no tienen buena legibilidad.
Puedes ir seleccionando fuentes mientras indagas cuáles son las más idóneas sobre tu proyecto y, finalmente, descargar todas las tipografías juntas.
FontSquirrel
Es una de las que más nos gustan por la presentación de la página. Las fuentes están bien clasificadas y es fácil encontrar las que buscamos, sobre todo usando la barra lateral derecha.
Además, cada fuente presenta información relevante con claridad y a golpe de vista, como quién es su autor y el tipo de licencia que posee.
Recomendamos usar el Test Drive para probar cómo lucen las fuentes gratuitas antes de descargarlas. No solo se pueden probar los estilos, sino también el cuerpo de las fuentes.
También es útil revisar la cantidad de glifos que tienen las fuentes para saber si tendremos todos los caracteres que necesitamos para la publicación en la que vamos a trabajar.
FontSquirrel cuenta con un identificador que facilita adivinar qué fuente es una tipografía que vemos en una imagen.
Con tecnología de Font Spring, Font Identifier permite subir un archivo de imagen; o bien pegar una URL de una web para ayudarnos a descifrar una fuente.
DaFont
Esta página web de fuentes gratuitas recopila un gran número de tipografías ornamentales. Destacan especialmente las script o caligráficas que simulan la escritura a mano y con pluma.
La descarga de las fuentes es prácticamente inmediata, ya que comienza la descarga a golpe de clic.
La clasificación de las fuentes en DaFont es un poco diferente a las demás páginas de descarga. Este es un plus para poder encontrar tipografías desde otra perspectiva.
Por ejemplo, se pueden elegir aquellas que parecen extranjeras o sexys, o bien las que se usan para ciencia ficción o relatos medievales.
En la plantilla Guillermo hemos usados una fuente de aspecto gótico para acentuar características propias de la novela histórica y costumbrista.
A mediados de abril de 2018 contaba con casi 35.000 fuentes gratuitas. A principio de 2024, tenía ya casi 85.000. Si eres de los que diseñan tipografía y te animas a compartirla puedes enviarla a esta plataforma para que la publiquen.
Por supuesto, existen otras páginas web para descargar fuentes gratuitas. Letramanía, 1001 Fonts, Fonts U2 y Urban Fonts son algunos ejemplos. Sin embargo, con Google Font, FontSquirrel y DaFont tienes el espectro tipográfico más que cubierto.
